Salud

Rinitis alérgica: cuida la salud de tu nariz

La rinitis alérgica (RA) es una enfermedad inflamatoria de la mucosa nasal a causa de la exposición de uno o varios alérgenos, la cual es reversible. Es común que se confunda con un resfriado debido a los síntomas parecidos que se presentan en ambas situaciones, sin embargo, a diferencia del resfriado, la rinitis alérgica no es provocada por un virus, sino por una respuesta alérgica a una sustancia inofensiva del interior o el exterior que el cuerpo identificado como nociva (alérgeno).

Dentro de los síntomas principales que ocasiona encontramos escurrimiento nasal, comezón en la nariz, congestión nasal, estornudos frecuentes, entre otros malestares que cuando son leves son molestos, pero cuando son más severos llegan a ser invalidantes, lo que llega a reducir considerablemente la calidad de vida de quien la padece, pues afecta su rendimiento en sus actividades cotidianas.

Ya que los signos y síntomas de este tipo de rinitis se pueden desarrollar a lo largo de todo el año y/o agravarse en ciertos períodos específicos (lo que se conoce como estacional), es muy importante cuidar y proteger nuestra salud nasal en todo momento.

Para ello, menciona el Dr. Conrado Polanco Ortíz, gerente de relaciones médicas de Esteripharma: “Existen auxiliares efectivos e inocuos como las soluciones electrolizadas de superoxidación cono pH neutro, llamadas SES, que protegen la mucosa nasal sin dañarla, manteniéndola limpia e hidratada. Gracias a su amplio espectro, también elimina virus pandémicos respiratorios como coronavirus e influenza, bacterias y hongos sin efectos secundarios y sin generar resistencia bacteriana, ideal para un uso prolongado seguro, ya sea como un acto preventivo de protección y/o como parte de un tratamiento integral, incluso en edades pediátricas”.

Una valoración médica oportuna siempre será la mejor opción para atender éste y cualquier otro tipo de padecimiento. Es el alérgologo quien determinará un diagnóstico certero e individualizado para cada caso, así como el tratamiento y las alternativas terapéuticas más convenientes para llegar a los resultados esperados. Estas alternativas pueden incluir:

  • Evitar el alérgeno en cuestión que provoca o agrava la rinitis alérgica.
  • Uso de cubrebocas constante.
  • Terapia farmacológica.
  • Vacunas antialérgicas específicas.
  • Lavados nasales.

Con respecto a los lavados nasales, se asocian con una mejoría en los síntomas nasales y calidad de vida, así como una reducción del consumo de medicamentos.

La rinitis alérgica se ha convertido en un problema de salud mundial debido al impacto que tiene en la productividad de las personas, además de que no es prevenible y su prevalencia continúa incrementándose. “Pongamos atención a la salud de nuestra nariz, que es la puerta de entrada para otras enfermedades respiratorias que pueden llegar a tener grandes repercusiones en nuestra salud general”, agrega Polanco Ortíz.

Por Juan Carlos González